La vitamina C (o ácido ascórbico) es un micronutriente esencial (esencial significa que no lo podemos sintetizar en el cuerpo y que por tanto lo debemos obtener de la dieta). Actúa como antioxidante, es decir protegiendo las células contra los efectos de los radicales libres. Además, la vitamina C promueve el normal funcionamiento del sistema inmune, interviene en el proceso de cicatrización de heridas, en la absorción y almacenamiento de hierro (sobretodo el de origen vegetal, llamado no hemo, tal como explico en este post) y la formación de vasos sanguíneos, cartílagos, músculos y colágeno en los huesos.
Cuando nos viene a la mente «vitamina C» automáticamente pensamos en una naranja o una mandarina. Pero, ¿sabíais que hay muchos otros alimentos más ricos en vitamina C?
He aquí algunos ejemplos, incluidos por orden descendente de contenido en vitamina C por cada 100 g:
– Guayaba
– Pimiento rojo – ver receta de paté de pimientos
– Brócoli – ver receta de cuscús de brócoli
– Col de Bruselas
– Papaya
– Kale – ver receta de ensalada de kale
– Fresa
– Kiwi
Todos tienen más vitamina C que una naranja o una mandarina. Por ejemplo, 100 g de pimiento rojo contienen 150 mg de vitamina C, mientras que 100 g de naranja unos 50 mg, y 100 g de mandarina unos míseros 25 mg.
Para que os hagáis una idea, la Cantidad Diaria Recomendada (CDR) de vitamina C en España es de 75 mg para mujeres y 90 mg para hombres -> ¡es decir solo medio pimiento!
Por cierto, la vitamina C es del tipo hidrosoluble, lo que significa que se disuelve en el agua. Por ello, un exceso de vitamina C consumida se elimina por orina, por lo que una intoxicación por vitamina C sería muy improbable.
Después de haber leído este post ya sabréis que muchas otras frutas y verduras son mejor fuente de Vitamina C que los cítricos. Además, ahora que no estamos en temporada de mandarinas y naranjas, creo que es más sensato promover el consumo de otras frutas y verduras de temporada, de producción local y a poder ser ecológicas (todo ello hace que además sean ricas en vitaminas y minerales).
Y vosotros, ¿consumís suficiente vitamina C?