Los azukis son unas alubias de piel rojo oscuro e interior claro, muy parecidas a las alubias blancas pero más pequeñas. Son de origen oriental, y aunque aquí aún no son muy conocidas, en otras partes del mundo forman parte de la dieta básica. Tienen un sabor particular, con un punto dulzón, lo que las hace aptas tanto para recetas dulces (helados) como saladas (ensaladas, guisos, hummus)
Como todas las legumbres, los azukis son una fuente de proteína vegetal genial. Concretamente, 100 g de azukis secos aportan 20 g de proteína.
Según la medicinal tradicional china y la macrobiótica el consumo de azukis tiene propiedades medicinales a nivel de riñones, ya que según dicen los fortalece, provocando que detoxifiquen más vivamente y la persona tenga más energía y vitalidad. Me parece muy curiosa esta relación, porque los azukis tienen precisamente forma de riñón…
De hecho, la similitud entre la forma de los azukis y su acción en los riñones no es excepcional. La medicina tradicional, no se sabe si por casualidad pero en todo caso muy acertadamente, al ver la similitud de forma entre algunos alimentos y órganos del cuerpo humano, ha considerado que el consumo de estos alimentos promovían la salud de dichos órganos. Por ejemplo, las nueces tienen forma de cerebro y desde hace milenios se han consumido por sus beneficios a nivel cognitivo. Ahora se sabe que, efectivamente, las nueces, gracias al Omega 3 que contienen, promueven el normal funcionamiento del cerebro, favorecen el desarrollo mental y el aprendizaje. Además, se ha visto que el Omega 3 ayuda a la formación del tejido cerebral del feto.
¿Será casualidad o es que la naturaleza es más sabia de lo que pensamos?
Pero bueno, hasta aquí las reflexiones existenciales. Vayamos al grano.
Esta es una receta de ensalada de legumbres, como muchas otras, pero con la peculiaridad de montaje visual precioso. ¿Quién ha dicho que la ensalada sea aburrida?
INGREDIENTES (2 personas):
- 150 g de azukis secos (crudos)
- 2 cogollos de lechuga
- 2 tomates
- 1 aguacate
- 1 pimiento rojo
- 1 pepino
- 2 ramas de apio
- 2 cs de alcaparras
- 2-3 pepinillos en vinagre
- 1 puñado de aceitunas negras
Aliño:
- zumo de limón, sal de hierbas, AOVE, mostaza… o lo que queráis
PREPARACIÓN (15 min + tiempo de remojo y cocción de la legumbre):
- Dejamos los azukis en remojo la noche anterior.
- Hervimos los azukis según instrucciones del paquete. Colamos y dejamos enfriar.
- Lavamos los tomates, el pimiento, el pepino y el apio. Los cortamos a daditos, junto con el aguacate.
- En una ensaladera, montamos las hojas de lechuga como si fueran pétalos de una flor (como veis en la foto).
- Añadimos los azukis y todos los demás ingredientes (que habremos mezclado con una cuchara previamente) encima de los “pétalos”.
- Aliñamos al gusto.