¿Quién dice que las hamburguesas vegetales son sosas? Seguro que no habrá probado estas.
Os propongo una receta vegana de hamburguesas que me he inventado. Usar yuca en este tipo de recetas es muy interesante porque aglutina y liga mucho la masa, con lo que no es necesario añadirle huevo (genial para veganos).
Por los que no conozcáis la yuca, es un tipo de tubérculo muy parecido a un boniato pero mucho más grande, de piel marrón rugosa y brillante y blanco por dentro. Quizá en España no es muy conocida, pero en países sudamericanos forma parte de la base de su alimentación. Si no la conocéis, os animo a probarla. La encontraréis en la mayoría de verdulerías.
La podéis utilizar en infinidad de recetas, como si fuera patata: en guisos, chips al horno, panes, etc.
Pero, ¡ojo! Debéis tener en cuenta que la yuca es muy tóxica si se consume cruda, con lo que es importante cocinarla bien.
INGREDIENTES (2 personas):
- 500 g de yuca (también se podría hacer con patata o boniato)
- 50 g de maíz dulce
- 1/2 pimiento rojo
- 50 g de judías verdes
- 1 zanahoria rallada
- 1 cs rasa de ajo granulado
- 1 cs rasa de curry dulce
- 1 pizca de sal
- 1 cp de albahaca
PREPARACIÓN (40 min):
- Pelamos la yuca y le quitamos el nervio central. La cortamos a trozos de 2-3 cm y la hervimos con abundante agua. Pasados 10 min añadimos las judías. Hervimos 5-10 min más. Colamos y reservamos.
- Opcional: si os sienta mal el pimiento crudo, podéis saltearlo un poco.
- Rallamos la zanahoria.
- Aplastamos la yuca cocinada con un tenedor y añadimos todos los demás ingredientes. Mezclamos con las manos. Hacemos bolitas y las aplastamos, para darle la forma y tamaño deseados.
- En una sartén a fuego medio, sellamos las hamburguesas un par de minutos, vuelta y vuelta. Pensad que no llevan carne y la yuca/judías ya han sido cocinadas previamente, con lo que nos podríamos comer las hamburguesas crudas. La función de este paso es simplemente tostar las hamburguesitas, para aportarles textura crunchy y que no queden pegajosas.
¡Y ya lo tenemos! Podemos acompañarlas con una salsa casera de mostaza, o de miso.
Si nos sobran hamburguesitas, ¡mejor que mejor! Las guardamos en nevera, donde el almidón de la yuca se convertirá en almidón resistente, alimento maravilloso para nuestras bacterias.